Son fantasías sexuales excitantes, impulsos o actividades que constituyen aspectos socialmente sancionables dentro de la normativa social. No obstante estas actividades incrementan en frecuencia e intensidad de manera que impiden o interfieren de manera significativa con la capacidad de emprender una actividad sexual con implicación afectiva recíproca.
Pueden implicar:
a) Patrón repetitivo de conquistas amorosas que implican a una sucesión de personas consideradas como objetos de uso
b) La masturbación compulsiva
c) Promiscuidad
d) Dependencia de incitadores sexuales anónimos (pornografía, llamadas obscenas, cibersexo)
La adicción sexual deteriora la vida familiar y social del individuo, generando igualmente sentimientos de culpabilidad, ansiedad y baja autoestima. Se observa una marcada falta de control de impulsos.
1. Se da un fracaso recurrente en resistir los impulsos
2. Se experimenta una sensación de tensión en los momentos previos
3. Se da un cierto grado de placer o alivio de la tensión durante la ejecución
4. Existe un sentimiento de pérdida de control
5. Se dan al menos 5 de las siguientes características:
a. Preparación esmerada
b. Aumento progresivo de la frecuencia
c. Esfuerzos por reducir el comportamiento
d. Duración excesiva
e. Repercusión no deseada en el ámbito laboral, familiar y social
f. Incremento de la tolerancia
g. Inestabilidad si no se cumple
Los intereses persisten más de un mes